Si hay sed, no hay un vino lo bastante malo como para calmársela. No es por tanto un bebido, que así llaman a los que tragan cualquier bazofia solo para enfurruñarse un rato y montar luego el espectáculo. Pepe bebe lo que le gusta, mucho, muy bueno y de un precio suficiente. Sólo es la sed la que en ocasiones puntuales le empuja a trincar sin desagravio. Bebe entonces demasiado, hasta caca líquida -- “estiércohol” que, como afirma, es un tipo de alcohol --. Dicen de él sus amigos que conserva un admirable sentido de la supervivencia y de ayuda al prójimo. Así y todo, gusta de la buena vida y mejor bebida. Hace un par de años, puede quizá, no sé muy bien, tres como mucho, llego a él, de rebote, una botella de Oporto Seco. Yo no sé, ni él sabía qué manos sucias e ingratas la habían desterrado pero era un vino, entre el brandy y el vino, tan elegante, tan masculino, que al probarlo por primera vez, él solo en una habitación vacía y naranja, dijo:
- Este vino es para beberlo en compañía.
(Esta es una historia oficial de Pepe Historias corregida y confirmada por Pepe Historias - Todos los derechos reservados)
1 comentario:
bien, por fin la segunda temporada de pepe historias!!
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