A las treintañeras solteronas les gusta hablar de todo menos de su edad; se sienten un poco solas pero si algo les sobra son amigas; no les gusta que las comparen con los treintañeros solterones porque ellas están solas porque quieren; de ellos piensan que son unos feos que no ha querido nadie, sin embargo, quedan de vez en cuando para tomar un café; tienen, dicen, una vida sexual muy activa; les gusta ir al boys y a la discoteca; les gusta irse de viaje juntas a buscar a un negrazo que las consuele; lloran y ríen viendo comedias románticas; tienen una vida milimétricamente calculada, tal y como ellas la han dispuesto; ellas son muy felices y las casadas son unas traidoras desdichadas, sin embargo, quedan de vez en cuando para tomar un café; llevan a sus sobrinos una vez al mes a donde les piden, se gastan el dinero que haga falta y al verlos, les entran unas ganas tremendas de que las inseminen artificialmente; son mujeres de principios y no hay Cristo en este mundo ni en el otro que pueda cambiárselos.
Yo tengo una tía treintañera solterona. Temía por ella porque pensaba que un día iba a suicidarse con sus amigas las de la secta de treintañeras solteronas. Pero no, mi tía se casa mañana. Y las otras vendrán a la boda disfrazadas de butifarra y mortadela, y pondrán medias sonrisas y estarán quejándose de todo, todo el tiempo. Y cuando el novio bese a la novia, no podrán dejar de echar una lagrimita, porque se les va otra del club. Y se lanzarán como locas poseídas a por el ramo, ya un poco borrachas. Y le pedirán a mi tía después de otros dos Martinis, en voz baja y de una en una para que ninguna otra se entere, ser madrina de su primer o segundo hijo, y luego volverán a su casa para llorar viendo a Hugh Grant y autoconvencerse de que tienen la vida que han elegido. Abrirán el último de Matilde Asensi y se dormirán cuando tengan sueño, solas.
3 comentarios:
Esto es un topicazo de los gordísimos.
Las solteronas de 30 años pueden o no ser felices y pueden o no haber elegido la vida que quieren llevar. Y esto te lo digo yo que ya lo soy pero con sólo 19.
Las solteronas de 40 ó 50 años son otro cantar.
Nada de topicazo. El contar la verdad, por muy general que sea, no quiere decir que se caiga en tópicos.
De hecho, es una realidad poco conocida, pero el número de solteros se está multiplicando. ¿Quién sabe si mañana no seremos todos treintañeros solitarios que buscan en secreto una vida menos individualista?
Se te ha olvidado decir que las solteronas treintañeras odian a sus cuñadas -aunque queden de vez en cuando para tomar un café- y que sólo se depilan en verano, cuando se van de crucero, las que qeudan del club.
Publicar un comentario